No te lo estás imaginando: COVID-19 provocó depresión y ansiedad en mexicanos
Cuando se habla de la pandemia de coronavirus, lo primero en lo que se piensa...

Cuando se habla de la pandemia de coronavirus, lo primero en lo que se piensa es en la cantidad de contagiados o muertes que esta provoca; sin embargo, de acuerdo con un estudio reciente, se dio a conocer que la crisis sanitaria por COVID-19 provocó ansiedad y depresión en los mexicanos.
Sí, así como lo lees. De acuerdo con la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, se dio a conocer que más población en México experimentó síntomas de estos desórdenes mentales que pueden convertirse en malestares físicos importantes.
Así que si durante este tiempo has sentido desánimo, fatiga constante, tristeza, sensación de irritabilidad frecuente, ganas de llorar constantes, mayor aislamiento, temor que no cede; probablemente experimentaste esta ola de depresión y ansiedad provocada por la pandemia.

Vivir con vivir con depresión y ansiedad en medio de la pandemia puede impactar en varios niveles | Fuente: Freepik
Y es que no es para menos; desde que se dio a conocer este virus en noviembre de 2019, muchas personas comenzaron a experimentar emociones desbordadas ya que temían no solo por su vida, también por sus familiares, la estabilidad económica, problemas de movilidad y transporte, dificultad para relacionarse, entre otras.
¿Cómo afecta la depresión y ansiedad a los mexicanos en medio de la pandemia?
La depresión y ansiedad en los mexicanos pasó de estar en un porcentaje del 15% a un 50% debido a esta situación que aqueja al mundo desde el pasado mes de noviembre de 2019, cuando surgió el SARS-CoV-2 en Wuhan, China.
En México, la OCDE indicó que la depresión pasó de un 3% a un 27%, dejando en claro que el coronavirus no solo afectó a las personas a nivel de salud física, también a nivel mental y emocional ha dejado importantes secuelas.
Esta información se dio a conocer en el informe «Mentes en forma, trabajos en forma«, en donde abordaron temas como la discriminación a los problemas mentales, la interrupción a la educación, el desempleo, entre otros factores.
Quizá uno de los temas más preocupantes relacionados con este hecho es que las personas con problemas de salud mental no reciben a tiempo un tratamiento adecuado que se convierte en un problema a largo plazo que requiere de mayor atención.
Aunado a ello, la ansiedad y depresión podrían golpear en aspectos como tasas de empleo más bajas y menor impacto en la productividad de las personas; si siente que estás pasando por esta situación, busca ayuda profesional.
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