¿Cómo interpretar la limpia con huevo de un bebé?

Las limpias con huevo son muy usadas para curar el ‘susto’ o el mal de ojo que puede afectar a todos, pero más comúnmente a los recién nacidos. Por eso te contamos cómo interpretar la limpia con huevo de un bebé.

El mal de ojo es una creencia que asegura que una persona puede producir daño a otra solo con la mirada. La envidia y energía negativa de conocidos y desconocidos pueden dañar a un pequeñito.

Suele manifestarse con llanto constante, diarrea, vómitos, pérdida de apetito y alteración del patrón del sueño. El bebé está nervioso o inquieto y no hay causa aparente, señal inequívoca de que necesita una limpia.

Paso a paso para interpretar la limpia con huevo de un bebé

Los síntomas del mal de ojo pueden aparecer en mamá durante el embarazo cuando familiares o amigos están dañando su estabilidad. Y dado que es el entorno el que afecta la salud de mamá, puede manifestarse también cuando el bebé llega al mundo.

Así que, con tu pequeñito en una posición cómoda y con ropa ligera, pasa un huevo fresco por su cuerpecito desde la cabeza hasta los pies haciendo movimientos circulares y ‘barriendo’ con la malicia.

Después de la limpia, rompe el huevo en un vaso transparente con agua e interpreta las imágenes:

Si se ve una especie de manto, pueden estar haciéndole un ‘trabajo’, las burbujas simbolizan energía negativa y, si en la yema se forman puntos rojos o negros, hay tendencia a enfermar.

Sin embargo, el ritual hizo efecto si lo que ves es la yema del huevo más clara o cocida, si salen burbujas directamente de la clara o si aparecen telarañas alrededor del huevo. De lo contrario, habrá que repetir la limpia.

Tu bebé podría necesitar una limpia con huevo, no lo dejes para después.

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