Padres e hijos

Una madre que sana sus heridas está dejando una poderosa herencia a todo su linaje

Seguro que has buscado opciones para crear un patrimonio financiero para tus hijos y, aunque...

Belem Capetillo

madre que sana sus heridas
Es la herencia más valiosa | Foto: Unsplash

Seguro que has buscado opciones para crear un patrimonio financiero para tus hijos y, aunque es buena idea, una madre que sana sus heridas está dejando la más valiosa herencia a todo su linaje. Estos son los beneficios de hacerlo.

Nadie nos enseña a criar a otro ser humano y lo mismo pasó con nuestros padres, así que inevitablemente hay huellas emocionales que pasan de adultos a niños y así sucesivamente. La buena noticia es que no somos esclavos del pasado, podemos reparar los daños.

Un papá ausente o emocionalmente no disponible deja una gran herida en la autoestima de sus hijos. Si fue tu caso y notas cómo ha afectado tus relaciones, no puedes perder de vista que estás a tiempo de cerrar esas heridas y romper con el patrón.

mujer que sana heridas

Hazlo por ti y por ellos | Foto: Unsplash

Por qué una madre que sana sus heridas está dejando una poderosa herencia a todo su linaje

Cuando decides hacer las cosas de una forma diferente, estás salvándote a ti, a tus hijas y a todo tu linaje. Cuando pones límites y defiendes a tus pequeñas de las opiniones de otros, estás dándoles un regalo de vida.

Tomar terapia y sanar tus heridas de la infancia te permite ser la protagonista de tu vida, dejar el rol de víctima y construir lo que tienes en mente. Más allá de que les digas a tus niñas que pueden ser fuertes y valientes, están aprendiendo de ti, de tu ejemplo.

mejore herencia hijos

No hay herencia más valiosa que la libertad | Foto: Unsplash

Cuando te curas del rechazo y abandono dejas de aceptar migajas de amor y ‘pones la vara alta’ tanto para ti como para tus hijas. Asumes tu compromiso como guía, sin embargo, respetas el rumbo que elijan quienes te siguen.

Por imposible que parezca, si aprendes a amarte también estás mostrándole a tu madre cómo hacerlo; sanas a tus antepasados y a tus descendientes cuando te pones como prioridad. Sueltas los dolores y liberas a quienes te rodean también de ellos; es duro, pero vale la pena.

Concéntrate en ser más que en tener y observa cómo tus hijos crecen en consecuencia.

***

No te pierdas el mejor contenido de Viviendo en Casa en YouTube.

Escrito por
Belem Capetillo