Así debes guardar las croquetas de tu perro para que no se infecten ni atraigan cucarachas

Tener perros es maravilloso, pero conlleva muchas responsabilidades y una de las más importantes es su alimentación y su salud, por eso es muy importante asegurarnos de que su comida esté siempre en buenas condiciones, y hoy te diremos cómo debes guardar las croquetas de tu perro para que no se infecten ni atraigan cucarachas.

Cuando dejamos abierto el costal de alimento no solo nos arriesgamos a que las croquetas se llenen de polvo y otros residuos, también pueden perder sus nutrientes y hasta exponerlas a riesgos, además, pueden atraer plagas como ratones o cucarachas que además de infestar nuestro hogar, ponen en riesgo la salud de nuestro suavelomito.

Mantén su alimento libre de gérmenes, bacterias y hongos, y evita que desagradables y peligrosas plagas entren en tu hogar. Tu perrito es parte de tu familia y merece una alimentación digna y saludable.

Así debes guardar las croquetas de tu perro para que no se infecten ni atraigan cucarachas

Tal como lo señala la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés), el alimento para perros se debe almacenar en un lugar seco y fresco, no importa si es seco o húmedo, nunca debemos exponerlo a lugares húmedos como debajo del fregadero.

Además, lo ideal es mantenerlo en su empaque original, pues estos costales están diseñados para que el alimento no se exponga a la humedad y no se descomponga, pues además lo protege de plagas, hongos y bacterias. Sin embargo, debes tener en consideración que cada vez que abras la bolsa se recomienda sacarle todo el aire posible a la hora de cerrarla y de preferencia ciérrala con un clip o un sello.

Si lo mejor para ti, para tu hogar y para tu mascota es tener la comida guardada en un recipiente, asegúrate de limpiarlo cada vez que las croquetas se terminen y déjalo secar perfectamente para que no tengan nada de humedad antes de vaciar comida nueva y nunca mezcles la comida vieja con comida nueva.

Si prefieres tener un contenedor, invierte en uno de calidad, aunque pueda parecer una gran inversión, así te aseguras de que las plagas o tu mismo perrito no puedan abrirlo, además conservará mejor la comida por mucho más tiempo evitando tirar tu dinero a la basura y poner a tu lomito en riesgo.

Si no quieres gastar una fortuna y tienes un perro chiquito, puedes guardar su comida en una jarra de plástico con tapa y mantenerla en un lugar fresco, seco y oscuro, aunque este recurso puede ser poco práctico si tienes perros grandes o son más de uno, pues la comida en la jarra no durará mucho.

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