¿No amas usar tus pantalones y camisas cuando aún lucen blancas relucientes? Estas prendas son fáciles de combinar y le aportan luz a tu rostro; sin embargo, el gusto suele durar poco tiempo pues ya sea por las constantes visitas a la lavadora o simplemente por estar guardadas en tu clóset, tienden a cambiar de color. La buena noticia es que con los tips de limpieza que aquí te daremos, lograrás evitar que tu ropa blanca se ponga amarilla.
¿Por qué las prendas blancas se percuden?
Existen varios factores que afectan el tono de los tejidos de tu ropa; desde el sudor, la exposición al polvo, las salpicaduras de ciertas sustancias o comida y hasta ciertos detergentes pueden ocasionar que tus prendas luzcan «sucias» o viejas aún cuando las acabas de lavar.
Además, irónicamente, cuando abusas del blanqueador o lo utilizas en cada lavada, terminas dañando las telas y tú mismo ocasionas que se pongan amarillas.
Comienza a cuidar tus playeras, camisas y demás prendas blancas. | Foto: Freepik
Por otra parte, usar demasiado detergente también afecta el tono de tu ropa blanca. ¿Has notado cómo al lavar tus tenis, si no los enjuagas bien, terminan amarillentos? Esto también le ocurre a las camisas, playeras y demás prendas claras.
¿Cómo evitar que la ropa blanca se ponga amarilla?
- Al lavar tu ropa blanca, evita utilizar muy seguido detergentes muy abrasivos y cloro. Si no se trata de una mancha terrible, es innecesario usar dichos productos químicos; mejor opta por remojar en agua caliente con unas gotas o rodajas de 2 limones y una cucharada de sal antes de lavar tus prendas.
- Otro producto excelente para blanquear tus prendas sin maltratarlas es el agua oxigenada y el vinagre blanco; sólo debes dejar tus prendas remojando en agua tibia con media taza de uno de estos ingredientes y después lavar como de costumbre.
- Guarda tu ropa blanca en un lugar fresco, oscuro y donde no esté muy expuesta al polvo; si no vas a utilizar esas prendas en mucho tiempo, te recomendamos envolverlas en papel o plástico (de preferencia oscuro para evitar el paso de la luz).
- Si tu ropa blanca ya se está poniendo amarilla, puedes agregar una cucharada de perborato a tu ciclo de lavado; las prendas quedarán brillantes.
- No abuses del detergente y enjuaga bien tu ropa con agua fría.
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