Así puedes multiplicar tus plantas de interior sin esfuerzo
Las plantas de interior son parte importante del hogar de muchas personas y quienes sean...

Las plantas de interior son parte importante del hogar de muchas personas y quienes sean fanáticas y amantes de las plantitas, no podrán negar que una vez que empiezas a cuidar una, quieres tener cientos para decorar tu casa y sentirte feliz, por eso, hoy te diremos cómo puedes multiplicar todas tus plantas para que tengas tantas quieras sin gastar mucho dinero ni esfuerzo.
El proceso es simple, pero casi mágico: con un trozo de tallo, agua, tierra y un poco de paciencia tendrás una planta nueva. Y si quieres otra especie para añadir a tu colección, puedes obtenerla totalmente gratis a partir de un tallo de la planta de algún conocido.
¿Por qué con un simple tallo? Una vez que recortas un trozo de planta, y lo separas de sus raíces, este fragmento lucha por volver a agarrarse al suelo, es decir, crea raíces. Justo lo que se requiere para obtener toda una planta nueva.
Así que no dudes en multiplicar todas tus plantitas de interior en casa. Además resulta ser una actividad bastante relajante que seguro te hará sentir mucho mejor y feliz.
Cómo multiplicar mis plantas de interior paso a paso
Muchas plantas de interior echan fácilmente raíces en agua. Es el caso de las suculentas y los cactus, pero también de muchas aráceas, una familia que incluye a las populares monsteras. Y lo mismo ocurre con los filodendros, las begonias, trepadoras como la hiedra o la planta teléfono.
Para lograrlo, debes cortar con ayuda de un cuchillo tijera un esqueje o tallo de entre 10 y 15 cm de largo. Aunque los trozos más largos también pueden proliferar, suelen dar plantas más débiles. Y lo mejor es escoger los extremos más nuevos que hayan crecido este año, ya que estarán biológicamente más activos.
Recuerda cortar justo debajo del punto donde las hojas se unen al tallo, conocido como nudo. Si dejas un trozo de tallo por debajo, la planta acabará por pudrirse.
También debes retirar las hojas de la parte inferior del fragmento, basta con dejar dos o tres superiores pero no olvides que toda la parte que quede en contacto con el agua deberá estar libre de hojas, de lo contrario se pudrirían lo que crearía un agua fétida que definitivamente no es el mejor lugar para que nuestra plantita de interior empiece a crecer.
Y listo, ahora solo tendrás que meter el tallo en un jarrón o frasco de cristal con agua, que de preferencia sea pequeño.
Colocarlo en un lugar con luz indirecta y esperar a que eche raíces. Puedes después moverlo a un recipiente con agua más grande o bien, plantarlo en una pequeña maceta con tierra y darle los mismos cuidados que le das al resto de tus plantitas.
¿Te gustaría multiplicar tus plantas de interior con este método?