Conseguir plantitas para llevar a casa es relativamente económico, sin embargo, conseguir macetones y maceteros pueden ser un tanto costoso. Por eso es que te enseñamos cómo transformar los garrafones de agua en macetas fácil y rápido.
Además de que tendrás una decoración muy original para tu casa, estás reutilizando y reduciendo la contaminación plástica. De paso, involucras a tu familia en una actividad que va a encantarles a todos.
Si tienes algunas plantas suculentas en casa, entonces, el garrafón de agua es la base que necesitabas para hacer un terrario que simule su hábitat real y les permita crecer sanas y salvas.
Crea un terrario o úsalo como una maceta tradicional | Foto: Pinterest daledetalles.com
¿Cómo transformar los garrafones de agua en macetas?
Hay varios tipos de plantas que bien podrían colocarse en una maceta hecha con un garrafón de agua, sobre todo las que requieren de poca agua para su crecimiento. El poto, la lengua de suegra y el aloe vera van perfecto en estos recipientes.
Lo que necesitas:
- Un garrafón de agua viejo
- Un bisturí
- Manguera de jardinería
- Herramientas de corte de sierra pequeña y sierra grande
- Un taladro
- Una remachadora y remaches
- Una brocha y pinceles
- Pintura negro mate
- Pintura de colores
Coloca plantas que resistan el calor | Foto: YouTube La Huerta Familiar Guerrero-Perez
Proceso:
Corta la parte superior del garrafón por el primer anillo. A continuación, corta la boquilla. Haz también orificios (con el taladro) en la base garrafón y asegura la parte superior que ya desprendiste (sin la boquilla) en la parte baja de lo que será tu maceta. Hazlo con remaches inoxidables.
Ahora, pinta el garrafón de color negro mate. Deja secar bien. Corta la manguera por uno de los costados a la medida de la circunferencia del garrafón y ensámblala en la orilla del garrafón para evitar cortaduras y cualquier otro tipo de accidentes.
Echa a volar tu imaginación | Foto: YouTube Huerta Familiar Guerrero-Perez
Finalmente, dale colorido a tu maceta como más te gusten. Recuerda que puedes colocar lo mismo plantas de interior que de exterior, sin embargo, asegúrate de que no estén directamente expuestas al sol, pues el calor podría dañar a la maceta y, en consecuencia, a tu plantita.
Si eres amante de las plantitas, necesitas una de estas en casa.
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