Criar con nalgadas: la triste lección que tus hijos aprenden con la violencia
La crianza es un tema bastante complejo y llevar a cabo esta de la mejor...

La crianza es un tema bastante complejo y llevar a cabo esta de la mejor manera para poder guiar a los hijos puede ser todo un reto; sin embargo puede que haya acciones aprendidas a través del tiempo que se crea son ideales para la corrección de la conducta. Criar con nalgadas: la triste lección que tus hijos aprenden con la violencia.
Tal es el caso de las nalgadas, que se han utilizado desde hace bastante tiempo como una forma de corrección y disciplina para los hijos, sin embargo, debes saber que las acciones violentas como estas pueden generar grandes repercusiones en tus hijos.
Según un libro publicado por la Dra. Tina Payne Bryson “Disciplina sin Lágrimas” refiere que “la disciplina efectiva significa que no solo estamos interrumpiendo una mala conducta o favoreciendo otra buena, sino también enseñando habilidades y alimentando, en el cerebro de los niños, las conexiones que les ayudarán a tomar mejores decisiones y a desenvolverse bien en el futuro”.
¿Criar con nalgadas? Así afecta a los pequeños
Así que, es correcto apuntar a que si se desea formar a un buen ser humano, las acciones violentas no serán favorables para lograr algo, y es que lo que puede generar en los niños las famosas nalgadas son:
Relacionar el dolor como amenaza: esto es así ya que, los padres que deberían ser una figura de protección, con estas acciones también se vuelven el origen de su dolor y su miedo.
Puede afectar a nivel neuronal: esto es debido a que los castigos duros como las nalgadas a la larga pueden producir en los hijos muerte de conexiones e incluso células cerebrales.
- Sentimientos de soledad y abandono
- Generación de más violencia
- Trastornos de la identidad
- Exclusión del diálogo y la reflexión
Como podrás darte cuenta, se tratan de repercusiones bastante importantes, así que, es necesario recalcar que la crianza respetuosa es fundamental para evitar caer en este tipo de prácticas y dañas a la larga a los hijos; así que para evitar recurrir a la violencia, puedes:
- Enseñarles de manera afectuosa y respetuosa las conductas favorables y las que no lo son.
- Establecer límites, así las niñas y niños comprenden más las reglas y límites que hay en el entorno.
- Ayudarles a que sean empáticos con los otros, para hacerles saber que sus emociones y las de los demás son válidas e importantes.
- Hacer que con ayuda sea más sencillo practicar sobre sus emociones y las relaciones sociales, y así que aprendan sobre el respeto.
Tomando en cuenta esto, sin duda en el futuro estos niños y niñas se convertirán en personas con inteligencia emocional, para empatizar y percibir sus emociones y la de los demás, así que evita la violencia.