Hay días en los que pareciera que las labores del hogar no tienen fin, por más que limpias, siempre termina luciendo desordenado sobre todo cuando tienes niños. Sin embargo, existen algunos hábitos que te ayudarán a mantener tu casa siempre limpia.
Así que si quieres ahorrar mucho tiempo para dedicar a otras actividades como hacer ejercicio, meditar, ver a tus amigas o salir a una cena romántica con tu pareja, estos son los hábitos de limpieza que te recomendamos seguir.
1. Limpia los espacios difíciles de alcanzar
Aunque no lo creas, los detalles pueden hacer que todo el trabajo que hiciste ordenando las mesas y recámaras se venga abajo. Por eso, por lo menos dos veces al año, dedica un día a asear todo aquello que sea de difícil acceso como el polvo de las lámparas, ventiladores, los cortineros (o si tienes persianas, la base de estas) y por supuesto, no olvides las partes altas de esos muebles que no sueles limpiar usualmente.
2. Recoger todo en el momento
No permitas que se acumule el trabajo; lo mejor siempre será regresar a su lugar las cosas en cuanto terminaste de ocuparlas, y esto no solo aplica para ti sino para tu pareja y hasta para tus hijos (enséñalos a hacerlo).
Lo mismo ocurre con los trastes sucios, es mejor lavarlos después de terminar de comer y que cada integrante de la familia se haga cargo de levantarlos de la mesa y lavarlos correctamente.
3. Cambiar las cortinas y lavarlas también son hábitos de limpieza
Con cada cambio de temporada (al entrar la primavera y el otoño), quita las cortinas que tenías y cámbialas por unas limpias, mientras las que recién retiraste deberás lavarlas para quitar los ácaros, bacterias, moho y polvo acumulados.
4. ¿Un día a la semana para mantener tu casa siempre limpia?
Este es un hábito que muchas personas tienen, aunque no por eso es correcto. De hecho, si puedes, mejor divide las áreas de tu casa por días de la semana. Es decir, puedes organizar tu semana en algo así: Lunes – el baño; martes – la cocina; miércoles – tu habitación; jueves – la habitación de los niños; viernes la sala y el comedor. De esta manera, evitarás gastar tus sábados o domingos en la limpieza de la casa y mejor dedicarlos a descansar o pasear con tu familia.
5. Limpia cada rincón del baño
Sí, el baño es una de esas áreas difíciles del hogar. Por lo mismo, el consejo es que lo incluyas dentro de tus hábitos de limpieza anuales para mantener tu casa siempre limpia.
Aprovecha para quitar el sarro del inodoro y la regadera que les da un aspecto muy desagradable; también elimina el moho de los azulejos y listo, tu baño parecerá totalmente otro.
