Aprende a preparar agua de rábano y dota tu cuerpo de enormes beneficios
Los zumos y extractos naturales brindan enormes beneficios al cuerpo pero en específico, el agua...

Los zumos y extractos naturales brindan enormes beneficios al cuerpo pero en específico, el agua de rábano aporta una gran cantidad de nutrientes y otros componentes que resultan maravillosos para la salud. Así que no lo pienses mucho y aprende a preparar esta bebida que te cambiará la vida.
El rábano es una planta herbácea de la familia de las brasicáceas popular por el fuerte pero atractivo sabor de sus raíces que usualmente se ocupan dentro de la gastronomía. Es originario de Asia y el Mediterráneo, sin embargo, ha llegado a convertirse en un alimento que se siembra en casi todo el globo terrestre.
Sus beneficios son enormes ya que aporta una muy ligera cantidad de calorías pero una enorme cantidad de nutrientes que actúan de manera rápida y eficaz en el cuerpo humano. No por nada las misma OMS recomienda su consumo de manera regular.
Quizás el problema principal sería cómo poder comer rábano de manera frecuente, ya que su sabor puede ser algo especial, sin embargo, se ha descubierto que consumirlo en agua se hace mucho más fácil y agradable de consumir sin perder ninguno de sus nutrientes.

(Foto: Pixabay)
Así que si te preguntas qué beneficios tiene y cómo puedo preparar agua de rábano, a continuación te lo explicamos:
Beneficios
- Ayuda a reducir el nivel de glucosa.
- Al ser alto en potasio previene calambres y otros dolores musculares, además funciona como un poderoso diurético que también ayuda a quemar grasas.
- Es un alimento óptimo para la eliminación de toxinas en el cuerpo.
- Contiene una muy buena cantidad de fibra que mejora la digestión y ayuda a saciar el hambre.
- Acelera el metabolismo gracias a sus propiedades minerales como el yodo.
- Mantiene el cuerpo hidratado.
- Es rico en vitamina C por lo que fortalece el sistema inmunológico y previene resfriados comunes.
- Descongestiona las vías respiratorias.
- Reduce el riesgo de problemas cardiovasculares ya que regula la presión arterial.
¿Cómo preparar el agua?
En muy sencillo, lo único que necesitas son 3 rábanos, 2 limones y 1 cucharada de miel de abeja.
- Pela los rábanos (aunque yo te recomiendo que dejes algo de cáscara para obtener más fibra).
- Ponlos en la licuadora, exprime los dos limones y agrega la cucharada de miel de abeja.
- Licúa hasta que quede todo bien disuelto o puedes dejarlo a medio licuar si buscas una consistencia más espesa.