Cómo lidiar con el dilema del cubrebocas a la hora de correr y ejercitarse
El cubrebocas debe ser de forma casi obligatoria parte del día a día de todas...

El cubrebocas debe ser de forma casi obligatoria parte del día a día de todas las personas al menos en México, convirtiéndose así en un accesorio que debemos llevar a todos lados incluso a la hora de salir a correr o realizar ejercicio en la calles, parques y demás, algo con lo que puede ser bastante difícil lidiar.
Seguramente no es nada agradable acelerar tu respiración y ritmo cardiaco mientras una máscara dificulta aún más los cambios físicos a los que estás llevando tu cuerpo, pero es inteligente y además cortés usar el cubrebocas si tienes que estar cerca de otras personas mientras haces ejercicio.
Y si bien no es completamente necesario su uso mientras te mantengas en zonas despejadas de gente o estes alejado de los demás. Por ejemplo, correr en algún lugar que está un poco abarrotado no es posible, sin embargo, si va es un espacio aparentemente libre, y llegas a encontrarte con un tumulto en la calle y no traes protección, podría resultar bastante contraproducente tu salida a ejercitarte.
Entonces, ¿cuál es la mejor forma de lidiar con este dilema del cubrebocas a la hora salir?, se preguntan los corredores y corredoras. Te compartimos las repuestas de algunos asiduos del ejercicio quienes han estado atravesando esta experiencia.

(Foto: iStock)
Dan Giordano, DPT, cofundador de Bespoke Treatments comenta:
«Siempre uso un cubrebocas, casi el 100 por ciento del tiempo cuando estoy entrenando afuera o adentro con clientes. Para ser honesto, todos son terribles. He pasado por unos siete tipos diferentes, y encontré tres con los que me quedo».
«Todas las máscaras que uso son de poliéster o algodón con filtros. Hago la prueba de velas para verificar que sean eficientes. Si puedes apagar una vela mientras usas tu máscara, no es algo bueno. Lavo mis cubrebocas al menos una vez a la semana, y como los que uso requieren filtros, también los cambio regularmente».
Knox Robinson, escritor y corredor dice:
«Prefiero evitar a la gente por completo que correr con la máscara».
«He estado en la Ciudad de México para ponerme en cuarentena, y he llevado un cubrebocas. Hice algunas mejoras con la marca de mi amigo en México llamada Migo, me encanta cómo se ve. Pero para ser honesto, prefiero evitar a la gente por completo que correr con la máscara.
Joe Holder, columnista de wellness en la revista GQ comparte su experiencia:
«Corro en lugares apartados y entreno solo, así que rara vez uso uno. El aire libre dispersará las partículas, ¿y si estás corriendo solo en un área aislada? No puedes contagiarte con tu propio aliento. Aún así, llevo un cubrebocas KN95 estándar en el bolsillo o en la muñeca, en caso de que se llene inesperadamente».
«Si estoy usando una máscara pero la ruta se llena un poco por un segundo, una cosa para recordar es que las medidas de distanciamiento social deben ser un poco más grandes cuando estás corriendo. Así que me aseguro de no estar corriendo directamente detrás o delante de alguien para que el camino de exhalación e inhalación no se alinee completamente».
«Intento usar un pañuelo o un cubrebocas cuando corro para tranquilizar y proteger a los demás. Hay momentos en los que llego a una intersección con casi nadie usando una máscara y hay poco espacio para distanciar, así que me pongo el mío para asegurarme de que me estoy cuidando. Por lo general, también elijo rutas que tienen menos tráfico peatonal».«Últimamente he estado usando un «cubrebocas deportivo» los cuales encuentras al azar en línea. No bromeo, eso es lo que dice el paquete. Es agradable porque no se sienta en mi cara ni se inhala cuando trato de respirar».
«Mi familia y yo nos dirigimos al norte del estado al comienzo de todo esto. Allá arriba, no necesito una máscara cuando salgo a correr, ya que no hay otras personas en las carreteras. Pero recientemente volví a la ciudad y decidí ir a la pista para hacer ejercicio, incluyendo algunas dominadas y otras cosas. No había escasez de personas, y pocas de ellas se distanciaban socialmente, y muy pocas usaban máscaras».
«He tomado muchas otras precauciones, no puedo estropear esto al no usar una máscara en lugares abarrotados. Si estoy en la ciudad, me pondré una máscara cuando haga ejercicio. Definitivamente fue duro y se puso sudoroso y viscoso. Nada de eso fue genial. Pero lo usé porque quiero ser responsable de mí mismo y de los demás, y no estoy tratando de enfermarme».
Ahora ya conoces cómo algunos deportistas están lidiando con el problema del cubrebocas pero al final, la responsabilidad de si usar o no, es completamente tuya.
¿Ya estas saliendo a correr o a ejercitarte en la «nueva normalidad»?
Con información de GQ.