El mundo es bastante contradictorio todo el tiempo y en todos los sentidos, como por ejemplo, con las cosas que supuestamente nos hacen daño y son malas para nuestra salud pero que al final de todo resultan ser benéficas para nuestra vida en general.
No comas tal cosa porque engordas o no te estreses por que te arrugas y se te cae el cabello, son el tipo de ideas con las que crecemos y vivimos toda nuestra vida sin siquiera saber en realidad que tan ciertas o no son.
De tal modo ocurre con las siguientes cinco cosas que siempre hemos tachado de «malas» pero en realidad son todo lo contrario.
Quizá esta curiosa regla no la encontremos en todo lo que acontece en nuestra existencia, sin embargo, saber que podemos disfrutar de algunas cuantas en vez de restringirlas siempre será alentador. Así que presta atención y en vez de preocuparte y restringirte tanto, mejor disfruta de aquellos placeres de la vida que pueden aportarte más de lo que pensabas.
5 cosas que creíamos malas pero no solo son
1. Beber vino todos los días
Siempre ha existido el debate sobre si beber vino de forma frecuente es o no bueno para nuestra salud. La mayoría diría que puede volverte alcohólico pero quizá no sea así, ya que de hecho, está científicamente comprobado que una copa de vino todos los días es realmente buena para tu salud.
Además de ayudar a tu sistema cardiovascular, el vino es bueno para la pérdida de peso. Algunos expertos incluso han insistido en que dos copas son recomendables, así que no tengas preocupación en disfrutar cada sorbo de una de las bebidas más ricas de la historia. Solo, y como con todo en la vida, modera su consumo.
2. Comer tu comida favorita
¿Cada cuánto no mueres de antojo de una hamburguesa con papas y refresco o de una pizza con orilla rellena de queso o de un delicioso helado lleno de chocolate y azúcar? Si estás buscando bajar de peso o mantener la línea, seguramente ya tachaste de tu lista todos esos alimentos procesados o llenos de aceite y grasas que tan bien saben, pero que tanto daño te hacen.
Pero debes saber que según Rachel Beller, nutrióloga estadounidense, privarte de la comida que te gusta puede crear ansiedad, misma que te hace comer en pequeñas dosis pero que resulta mucho más contraproducente.
Darte una comida a la semana para deleitarte con esos deliciosos platillos que tanto amas es una mejor opción.
3. Descansar del ejercicio
Una persona súper motivada y adicta a la actividad física te dirá que ejercitarte diario y cada vez con mayor intensidad es de lo mejor que puedes hacer para mantenerte saludable, bajar de peso y sentirte mejor en términos generales.
No obstante, esto podría ser un grave error para muchos. El proceso de recuperación es tan importante como el ejercicio mismo. Así como todos los días antes y después de ejercitarte debes estirarte, también necesitas darle días de descanso a tu cuerpo.
No importa qué tantas ganas tengas de seguir con tu récord perfecto, lo mejor es que te des un día para no hacer ejercicio y busques otro tipo de actividades.
4. Comer papas
Las papa han sido por años el alimento prohibido para quienes buscan perder peso o cuidar la figura. Pero lo que muchos no investigan son los enormes beneficios de este alimento.
Cada porción tiene 160 calorías, por lo que puede ayudarte a sentirte satisfecho con menos de lo que crees. Además son ricas en potasio, fibra, vitamina C, calcio y magnesio y son buenas para el cuidado de la piel.
Cada forma de cocinar tus papas resalta alguna de sus cualidades, aunque claro, evitar hervirlas para que no pierdan muchos nutrientes es una buena opción. Incluso comer papas fritas es bastante bueno, solo debes asegurarte de que sean papas naturales.
5. El estrés
El estrés es algo contra lo que todas y todos luchamos día tras día. Y claro, este estado psicológico y emocional puede ser bastante contraproducente para la salud, sobre todo si se manifiesta en largos y constantes periodos.
Pero por si no lo sabías, puede ser bueno para nosotros en pequeñas dosis. Según Leslie Connor, psicóloga estadounidense, estresarnos puede ser un aliado mientras sepamos cómo lidiar con él.
Niveles moderados de estrés ayudan al rendimiento, activando al cuerpo y la mente para trabajar de forma continua y sin interrupciones.
Como verás estas cosas, hábitos o placeres cotidianos pueden ayudarte a sentirme mejor si los abrazas con moderación pero sobretodo con mucho gusto. Así que no dudes en darte un gusto de vez en vez, beber aquello que te relaja, comer tu platillo favorito y descansar cuando tu cuerpo te lo pida.
¿Cuál de estas 5 cosas supuestamente malas te habías estado prohibiendo?
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