El COVID-19 es una enfermedad que no se erradica tan fácilmente puesto que sus síntomas pueden persistir en las personas incluso después de haberse recuperado. Fenómeno al que han llamado síndrome de COVID prolongado el cual, ya lleva meses siendo un factor más de alerta para todo mundo.
El post COVID o COVID prolongado se puede manifestar con síntomas que se asemejan al agotamiento agudo, fatiga, tos persistente, dificultad para respirar, hasta cicatrices cardíacas y pulmonares más críticas. Este síndrome podría afectar incluso a niños de hasta 12 años.
¿Por qué es tan alarmante?
Lo que hace al COVID prolongado un síndrome tan alarmante es que, incluso las personas que se recuperan rápidamente o que no requieren hospitalización, se pueden ver afectados por los efectos nocivos de esta afección.
Esto incluye también a los pacientes asintomáticos quienes podrían ser incluso de los que más riesgo corran ya que de primera instancia, la mayoría ni siquiera sabe que es portador del virus.
Y si bien no existe un detector preciso para determinar el riesgo de COVID prolongado, se dice que algunas personas tienen una mayor probabilidad de desarrollarlo, al igual que lo hacen con la infección inicial.
¿Quiénes corren riesgo de padecer COVID prolongado?
(Foto: Freepik)
Personas que presentaron 5 o más síntomas al sufrir la enfermedad
Aquellos y aquellas que al haberse contagiado de COVID-19, presentaron al menos cinco síntomas característicos como fiebre, dolor de cuerpo, de cabeza, dolor de garganta, pérdida del olfato, etcétera, corren un mayor riesgo de sufrir de COVID prolongado; esto de acuerdo a la revista Times of India.
Por otra parte, un estudio realizado por King’s College, Londres, detalló que en más de 4000 pacientes recuperados, también se determinó que, si bien es importante buscar tratamiento sintomático a tiempo, las pruebas mal diagnosticadas o tardías también podrían poner a las personas en riesgo.
Mujeres
Aunque se sabe que las mujeres tienen niveles más altos de enfermedades que protegen los receptores ACE2 que los hombres, curiosamente, es más probable que tengan mayor probabilidad de presentar los síntomas del COVID prolongado.
Y si bien las razones de esto podrían ser muchas, varios estudios realizados en todo el mundo han observado que es probable que las mujeres sufran síntomas como confusión mental, pérdida de cabello, fatiga, deterioro del sentido del olfato.
Investigaciones realizadas en Italia, también observaron que las mujeres tenían más probabilidades de sufrir manifestaciones psicológicas, enfermedades mentales, estrés, insomnio, trastorno de estrés postraumático y ansiedad después de recuperarse de la enfermedad.
Incluso hay mujeres que han presentado problemas de fertilidad y al menstruar meses después de luchar contra el virus.
Personas mayores de 50 años
Desde el inicio se nos informó que la edad es uno de los mayores factores para determinar la gravedad de la infección en una persona. No por nada es también factor para determinar si corres riesgo o no, de padecer COVID prolongado.
Esto se debe principalmente por la inmunidad frágil o en disminución y la probabilidad de desarrollar comorbilidades. Por lo tanto, los mayores de 50 años pueden tener una batalla más prolongada para lidiar con los síntomas de COVID, siendo la fatiga, el dolor corporal, la confusión mental y la falta de aliento los más comunes.
Aquellos con problemas respiratorios previos a la enfermedad
Personas con afecciones respiratorias como asma, EPOC, problemas pulmonares o respiratorios siempre han tenido un mayor riesgo de desarrollar infecciones pulmonares graves a causa del COVID-19 por lo que no es extraño que sean más propensos a desarrollar y verse afectados por los síntomas del COVID prolongado.
Personas con sobrepeso u obesidad
Desde inicios de la pandemia se dió a conocer que personas con problemas de sobrepeso u obesidad corrían un mayor riesgo de presentar graves dificultades a causa del virus. Para muchos, también podría significar un mayor riesgo de desarrollar problemas de salud como diabetes y presión arterial alta.
Ahora, la investigación indica que la obesidad también podría ser un factor de riesgo para desarrollar COVID prolongado, sin importar si se es joven o viejo.
Por otra parte, el aumento de peso excesivo también puede prolongar los plazos de recuperación, hacer que una persona experimente dificultad para respirar y hacer que las personas experimenten síntomas persistentes durante meses seguidos.
Si te encuentras dentro de las personas con riesgo de desarrollar COVID prolongado nunca está de más hacerse la prueba para verificar que no se tenga el virus.
Por otro lado, si ya padeciste la enfermedad y actualmente te encuentras recuperado o recuperada, contactar a tu médico de confianza nunca estará de sobra para que él o ella, pueda darte un diagnóstico más preciso y así conocer si eres propenso a desarrollar o padecer de COVID prolongado.
¿Ya habías escuchado de este síndrome posterior al COVID-19?
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