Quitarte de encima esos kilitos de más sin dieta ni ejercicio es el sueño de todos; sin embargo, NO es posible. Por más que haya pastillas para bajar de peso que prometen milagros, estos pueden tener efectos secundarios altamente peligrosos e incluso letales.
De acuerdo con la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, los compuestos de estos fármacos “milagro” (que usualmente no han pasado por ningún control sanitario y se venden como suplementos alimenticios) suelen contener derivados de anfetaminas, benzodiazepinas, bloqueadores beta, sibutramina, entre otros con efectos adversos para la salud.
Estas pastillas para bajar de peso rápidamente, ofrecen a los consumidores una solución sin el esfuerzo que requiere seguir una dieta y una alimentación saludable; sin embargo, son muy peligrosas, ya que pueden ocasionar accidentes cerebrovasculares, problemas cardíacos, problemas del hígado o riñones, deshidratación, dolor abdominal, depresión, psicosis, ideas suicidas, insomnio crónico, hipertensión y daños graves al feto en el caso de las mujeres embarazadas.
Algunas de las pastillas para bajar de peso más famosas y peligrosas son:
- Sibutramina
- Orlistat (Xenica)
- Rimonabant
- Qsymia
- Dexfenfluramina (Redux)
Así que ahora lo sabes, si quieres bajar de peso, no busques fármacos «milagrosos» la mejor solución siempre será acudir con un nutriólogo para que te asesore y te brinde una dieta personalizada según tus necesidades. Recuerda que ningún cuerpo es igual, todos tenemos características distintas y padecimientos diferentes, así que no te dejes llevar por el camino que pareciera más sencillo.
Lo más importante de todo siempre será cuidar de tu salud, los resultados -aunque quizá sean un poco más lentos- serán mucho mejores por dentro y por fuera, además de que no sufrirás el temido «rebote».
En Viviendo en Casa proporcionamos información de salud con fines de divulgación que de ninguna manera sustituye valoraciones médicas o consultas de cualquier profesional de la salud.
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