La alarma forma parte de la vida millones de personas quienes se tienen que levantar a trabajar a determinada hora entre otras cosas, y al contrario de lo que muchas personas creen, un sonido ruidoso no te ayuda a despertar más rápido, es mejor tener una alarma más suave. Te explicamos por qué.
Afortunadamente, hoy tenemos la virtud de poder cambiar nuestro tono de alarma por distintas opciones que vienen instaladas en nuestro celular, incluso con algunas de nuestras canciones favoritas o playlists aleatorias de plataformas como Spotify.
Y cuando digo virtud, es por que ya no tenemos que esperar a que cante el gallo o la vieja alarma de buró nos levante medio infartados por el ruido tan horrible que genera, que si bien, en su momento se creía que era la mejor forma de levantarse para estar alerta desde primera hora, hoy por hoy se sabe que produce un efecto contrario.
Las alarmas con sonidos fuertes y repetitivos solo generan un efecto de confusión en el cerebro al que los científicos llaman inercia del sueño.
La inercia del sueño es un trastorno del sueño-vigilia que se caracteriza por presentar un estado de atención y cognición reducida. Es decir, es el típico estado de aturdimiento en el que nos encontramos al despertar y que puede durar desde unos minutos hasta varias horas.
(Foto: Freepik)
Y como bien sabrás, un estado de inercia del sueño demasiado prolongado puede llegar a afectar a nuestro rendimiento durante el día, incluso, provocar situaciones peligrosas como accidentes de tránsito o peatonales.
Es por esta razón que científicos de la Universidad de Melbourne llevaron a cabo un estudio para comprobar cuál era la mejor manera de despertar y, según los autores, las personas que se despiertan escuchando música melódica sufren menos niveles de inercia del sueño que aquellas que utilizan el clásico pitido de alarma.
Los científicos explican que si bien, en general cualquier sonido de alarma puede llamar al atención del ser humano, cuando se trata de música melódica la atención se puede mantener durante más tiempo ayudando a que el cerebro vaya calentando y a consecuencia funcione mejor por la mañana.
“Cuando se despiertan, las personas que experimentan inercia del sueño pueden mostrar signos de disminución del estado de alerta y cognición reducida, manifestándose en errores involuntarios”, explica Stuart McFarlane, uno de los autores.
También es verdad que los sonidos muy fuertes puede ser bastante aturdidores, por lo que la recomendación a la hora de poner tu alarma antes de dormir debe ser la siguiente:
- Escoger alguna canción melódica de algún género musical que te agrade. Los autores del estudio señalaron como ejemplo Good Vibrations de los Beach Boys y Cure to Me de The Cure, un par de canciones pop con un fuertes peor agradables elementos rítmicos.
- Otra opción es usar música clásica o sonidos de la naturaleza.
- Una vez elegida la melodía o sonido, es importante que tu alarma no este a un volumen muy alto ya que podría resultar igual al desconcertante y estresante si suena demasiado fuerte. Así que baja el volumen o busca una opción tipo fade-in, que vaya incrementando el volumen poco a poco.
Como verás, tener una alarma más suave no es solo para despertar mas tranquilo o de buenas, sino que a lo largo del día te permitirá tener un mejor desempeño en cualquier actividad o tarea que debas realizar.
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