¿Cuántas veces no te han dicho frases como «pero saboréalo» o «no es competencia»? De acuerdo con los investigadores, el qué tan rápido comes puede ser un indicador que afecta de forma importante a tu salud. A continuación te contamos cómo es que funciona este detalle del metabolismo.
Cuando comes, una de las recomendaciones indispensables para una buena alimentación no solo es que consumas los alimentos del «plato del buen comer», también es importante saber cómo comes. Al respecto, muchos nutriólogos apuntan que para ayudar al sistema digestivo es fundamental masticar hasta unas 20 a 25 veces la comida.
Pero la realidad es que muchas veces en medio del ajetreo o de los malos hábitos se vuelve muy complicado tomar en cuenta estos apuntes que los médicos hacen en pro de la salud. Algunas personas por su rutina laboral o simplemente porque no saben sobre la forma correcta de masticar, solo mastican unas tres veces y se pasan la comida.
La velocidad con la que comes puede hacerte blanco de enfermedades | Fuente: Unsplash
Hace poco te contamos cómo es que las papas fritas por más que comas no te vas a saciar, y eso tiene mucho qué ver con la función de las señales cerebrales, así como de las encimas y su activación en el paladar. Algo muy similar ocurre cuando ingieres los alimentos de manera veloz y sin tomar en cuenta tus necesidades.
Al respecto de la rapidez con la que comes, recientemente se publicó un estudio en la National Library of Medicine, impulsado por el Consorcio CIBER. Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, Instituto de Salud Carlos III, Madrid al respecto de la velocidad con la que la gente come.
Ahora, te explicamos por qué la manera en la que comes puede indicar demasiado sobre tu estado de salud.
¿Por qué es importante para tu salud saber qué tan rápido comes?
Sobre el tema, los especialistas apuntan a que el comer despacio ayuda a controlar la cantidad y a reconocer la calidad en los alimentos; por el contrario quienes son muy veloces al comer con más propensos a sufrir obesidad.
De acuerdo con la información, al masticar menos se tiende a ingerir más comida a lo largo del día; esto impacta en temas como índice de masa corporal, la circunferencia de cintura, el índice de masa grasa, la presión arterial, la glucosa plasmática en ayunas y el perfil de lípidos.
La investigación determinó que estar consciente de qué tan rápido comes te puede hacer menos propenso a:
- Riesgo de prevalencia de sobrepeso y obesidad
- Mayor índice de masa grasa, presión arterial y niveles de glucosa en plasma en ayunas
- Peor salud cardiometabólica ligada a mayor adiposidad
Así que ya lo sabes, ten en cuenta qué tan rápido comes y haz cambios para cuidar tu salud.
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