¿Sudas mucho cuando duermes? Ómicron y otras 5 posibles causas
Sudar es completamente normal, incluso si estamos dormidos cuando estamos muy abrigados o si la...

Sudar es completamente normal, incluso si estamos dormidos cuando estamos muy abrigados o si la temperatura es muy alta, sin embargo, si no hay ninguno de estos factores, puede ser un síntoma de algún problema de salud y debemos visitar a nuestro médico, es por eso que hoy responderemos la pregunta: ¿Sudas mucho cuando duermes? Ómicron y otras 5 posibles causas.
Como sabes, el sudor nocturno es natural, pues es la forma de eliminar calor corporal por clima, por lo que traes puesto, y hasta si tienes alguna pesadilla u otro factor emocional, pero si esta sudoración llega al punto en el que necesitas cambiar las cobijas o tu ropa a media noche, puede deberse a alguna otra situación importante, sobre todo su esta sudoración viene acompañada de cansancio, fiebre, pérdida de peso o de apetito.
Si eres una persona que suda mucho de forma normal no debes preocuparte por las sudoraciones nocturnas, pero cuando son extremas al grado de empapar las telas que están en contacto con tu piel, debes consultar a un especialista para que descarte problemas que, incluso, pueden llegar a ser graves.

Los episodios de sudores nocturnos son parte de los síntomas de la variante ómicron | Fuente: Pexels
¿Sudas mucho cuando duermes? Ómicron y otras 5 posibles causas
- Ómicron: De acuerdo con especialistas, muchos pacientes contagiados de esta variante de COVID-19 están sufriendo episodios de sudores nocturnos, síntoma que no se había registrado antes.
- Producción excesiva de la hormona tiroidea o menopausia
- Puede estar relacionada al consumo de algunos medicamentos
- Ansiedad
- Tumores o algunos tipos de cáncer como leucemia y linfoma de Hodgkin
- Infecciones crónicas
Al acudir con tu médico seguramente te preguntará la frecuencia y la intensidad con la que tienes estas sudoraciones nocturnas, si tomas algún medicamento nuevo o si tienes otros síntomas. Puede ser que no sea nada de lo que debas preocuparte, pero otras señales como dolor, fiebre o escalofríos podrían ser un indicativo de que debes revisarte.
Para evitarlos puedes ventilar la habitación en la que duermes, abrigarte conforme a la temperatura, no cenar demasiado y muy tarde para evitar que nuestro cuerpo trabaje demasiado cuando debería descansar, evita ver o escuchar cosas que te estresen o te pongan ansioso antes de dormir y cambia las cobijas por unas que respiren mejor. Si a pesar de esto sigues con episodios fuertes de sudoración nocturna, anota en un cuaderno la frecuencia, intensidad y otros síntomas y visita a un especialista de la salud para realizarte un estudio.
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