La peligrosa y desagradable razón por la que debes limpiar las latas de refresco antes de beber

Las latas son una herramienta increíble que nos permiten mantener alimentos y bebidas a salvo para disfrutarlas cuando queramos, sin embargo, existe una peligrosa y desagradable razón por la que debes limpiar las latas de refresco (y todas las demás) antes de beber. 

Algunos contaminantes peligrosos se pueden asentar en la parte superior de las latas, incluso si vamos a servir el líquido en un vaso es importante limpiar la lata, pues al momento de servir el contenido este podría contaminarse. Entre los contaminantes que se pueden encontrar en las latas son: moho, levadura, coliformes, estafilococos y más.

En ocasiones, cuando las latas están guardadas en bodegas se contaminan, de hecho, el sistema de centros de investigación del Conacyt explica que la leptospira es una bacteria presente en la orina de roedores y otros animales que se puede transmitir a los humanos. Además de esta bacteria, hay toda una cantidad enorme de gérmenes que puede tener una lata con un gran riesgo de afectar nuestra salud.

Además, nunca hay que comprar aquellas latas que estén golpeadas, pues tiene varias capas que, cuando se abollan, pueden perder su capacidad de proteger y conservar adecuadamente el contenido.

Tampoco debemos comprar latas que estén oxidadas o hinchadas, pues cuando están ‘infladas’ puede indicar contaminación microbiológica, ya que se genera gas que hincha la lata.

De acuerdo con Debby Braun, ingeniera en alimentos, siempre hay que limpiar las latas antes de beber el líquido que contienen, pues no sabemos de dónde provienen, dónde se almacenaron, y probablemente pasaron ratones sobre dichas latas, y así es como debes limpiarlas:

• Antes de tomar el líquido, debemos tomar suficiente agua con jabón y con un cepillito hay que limpiar toda la tapa de la lata
• Luego de tallar, limpia el resto de la lata con el agua con jabón, también puedes usar agua corriente
• Posteriormente hay que enjuagar bajo el chorro de agua
• Por último, seca la lata con una toalla de papel
• Ya limpia la lata puedes abrirla y consumir el contenido

Si estás en la calle puedes limpiar la lata con un trapo o servilleta para eliminar la mayor cantidad de polvo o suciedad, sin embargo, esta práctica solo limpia, pero no desinfecta. Recuerda no limpiar las latas con productos químicos, pues hay que alejar los productos potencialmente cáusticos de la boca.

También puedes limpiar las botellas con agua caliente o ponerlas bajo el chorro de agua, pero recuerda que debe ser toda la lata y no solo la boquilla, pues nunca sabes dónde ha estado. Además, es importante que JAMÁS limpies las latas con la mano, pues te llevarás todos esos gérmenes a la piel y luego pasarán a lugares como tu cara.

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