Parecería que para tener unas toallas ‘pachoncitas’ el suavizantes es la única alternativa, pero aunque los productos ayudan, la clave está en la técnica de lavado. Te enseñamos cómo lavar tus toallas de baño para que queden suaves con solo 3 hacks de limpieza del hogar.
Empecemos por aclarar que una buena toalla para secar la piel después de la ducha debe estar confeccionada 100% en algodón, tiene una capacidad de absorción única y es gentil con la epidermis.
Ahora bien, también debemos tener presente que los blancos se lavan una vez a la semana por salud. Los residuos que dejamos en las toallas, la humedad y el oxigeno favorecen el crecimiento bacteriano.
Puedes suavizarlas con estos 3 pasos | Foto: Pexels
3 pasos: Cómo lavar tus toallas de baño para que queden suaves sin usar suavizante
Aunque el suavizante aporta un olor agradable a la ropa, usarlo tiene sus desventajas. En el caso de las toallas de baño, crea una película que reduce su capacidad de absorción y, aunque quedan blanditas, ya no cumplen con su objetivo.
Con estos 3 hacks conseguirás que tus toallas queden esponjositas sin mucho rollo:
- Ciclo corto y en frío. El agua caliente y pasar mucho tiempo en la lavadora puede dañar el tejido y reducir drásticamente su tiempo de vida.
Alargarás la vida de tus toallas también | Foto: Pexels
- No debes sobrecargar la lavadora. Además de que estarás dañando tu electrodoméstico, cargarla demasiado hace imposible que el lavado de tus prendas sea efectivo.
- Usa vinagre. Después del lavado, sumerge tus toallas en agua fría con un chorrito de vinagre blanco y el jugo de un limón. Este ingrediente es una alternativa natural al suavizante de ropa, es antibacterial y deja en la ropa un aroma fresco.
Con este truco de limpieza del hogar vas a ahorrarte un producto y un mal rato con tus blancos.
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