Un perro es mucho más que una mascota, es parte de la familia. Y por supuesto queremos cuidar lo mejor posible de su salud, así que aprendamos sobre una de las enfermedades que con más frecuencia puede atacarlo.
La sarna en perros hace referencia a todas aquellas patologías contagiosas causadas por ácaros que se alimentan de la piel y sus descamaciones, como es de esperarse, causan una intensa comezón a los perritos.
La picazón intensa ocurre justo donde el ácaro está cavando. Hay que decir que el contagio es frecuente de perro a perro, pero también puede ser contagiada a seres humanos. De ahí la importancia de tomar acción a tiempo.
Los perros de raza pura y pelo corto suelen contagiarse más | Foto: Pexels
Síntomas de la sarna en perros
Además de limpiar las patas de los perros después de un paseo, es importantísimo que estés pendiente de él, particularmente si tuvo contacto con otro perro. El rascado intenso es el más común de los síntomas, pero no el único. Atiende estas señales:
- Picor y ardor en la piel.
- Pérdida del apetito.
- Pérdida de peso.
- Debilitación del pelaje.
- Heridas y llagas en la piel.
- Piel seca y escamas cutáneas.
- Manchas rojas en la piel.
- Mal olor.
- Calvas.
La medicación inyectable suele ser parte del tratamiento | Foto: Pexels
Y, sin afán de asustarte, debes saber que la sarna puede llegar a producir la muerte del perro y que uno de los derechos de los animales es precisamente que la duración de su vida sea conforme a su longevidad natural. Tenemos la responsabilidad de cuidarlo
Si identificas una o varias de estas señales, visita al veterinario inmediatamente. Dependiendo del tipo de sarna y del estado de desarrollo de la infección, el tratamiento suele durar uno o dos meses.
La sarna puede atacar a todo tipo de perros | Foto: Pexels
Además, toma en cuenta que razas de pelo corto, como el Shar Pei y el Dóberman, están más predispuestas a contraer sarna. La raza de perro Rottweiler también.
Para prevenir, procura mantener al perro alejado de animales infectados, inspeccionarlo y asearlo de forma regular y llevar el calendario de desparasitación y vacunas al día.
Con una buena higiene y mucho amor, tu lomito estará sano y salvo.
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