Este método japonés enseñará a tu hijo a multiplicar mentalmente sin calculadora, fácil y rápido
Enseñar a multiplicar a un niño puede ser muy retador, sobre todo si eres una...
Enseñar a multiplicar a un niño puede ser muy retador, sobre todo si eres una de esas personas que aprendió a hacerlo a base de memorizar más que con un buen razonamiento. Pero con este método japonés para multiplicar, será mucho más fácil compartir con tus hijos.
Multiplicar es realizar una operación aritmética que consiste en sumar un número tantas veces como indica otro número. Repasar las tablas de multiplicar puede ser útil, pero hay mejores formas de entrenar el cerebro.
Y para entrarle al tema como debe ser, es importantísimo dejar en claro que los niños no odian las matemáticas, no son ‘malos’ por naturaleza, el problema está en cómo se enseña. A menos, por supuesto, de que tus hijos tengan atraviesen alguna condición que limite su aprendizaje.
Ayudará a los niños a relacionarse mejor con las matemáticas | Foto: Pexels
Método japonés para multiplicar
Te recomendamos que programes, junto a tu hijo, cada tercer día una sesión para aprender a multiplicar. Puedes motivarlo con el árbol de los logros, un método que promueve la responsabilidad y buenos hábitos en los niños.
Y este es el paso a paso del método japonés para multiplicar:
Con el ejemplo de 42 x 21, primero, se dibujan líneas horizontales, tantas como cifras tiene el primer número de la multiplicación. En este caso serían 4 y, más abajo, 2.
Ahora, con el 21, la segunda cifra, también se dibujarán las líneas correspondientes a los números que la componen, pero en vertical y sobre las horizontales previamente dibujadas.
Así es como luce otro ejercicio finalizado | Foto: YouTube Nacho Castellano
Con las líneas verticales sobre las horizontales se generan puntos de intersección y la suma de esos puntos será lo que nos de el resultado final de la multiplicación.
El de la primera zona de intersección es el primer número del resultado, la segunda y tercera se suman y da la segunda cifra y el área que queda es el último valor que necesitas. El resultado es 882.
Aprender a multiplicar será mucho más divertido | Foto: Pexels
Con este tipo de trucos conseguirás que tu hijo ame la escuela y, además, van a resolver más rápido ciertas lecciones y así tendrán tiempo para compartir. Es un ganar-ganar.
La magia para enseñar a tus hijos no está en el qué sino en el cómo.
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