Ignorar los berrinches de tu hijo es la peor idea y esta es la razón

Sabemos que nada te desequilibra tanto como los berrinches de tu hijo, sobre todo, cuando son recurrentes. Pero aún más importante que este comportamiento es lo que hay detrás de él, por eso, estos consejos para padres te serán de gran ayuda para conectar de una vez por todas con tu pequeño.

Y es que estas rabietas no son malas cuando aprendemos a manejarlas, son necesarias para que aprendan a regular su ira, rabia y angustia. Son parte de la evolución conductual de los niños, por eso es que reprimir este tipo de manifestaciones es lo peor que puedes hacerle a tu hijo.

Los berrinches de tu pequeño son la respuesta a un deseo que no ha podido comunicar de otro modo. Puede tratarse de cansancio, necesidad de atención, tristeza por alguna pérdida, deseo de hacer algo o la forma en que imita tu comportamiento. Si tu hijo solo obedece a gritos, ¿qué le estás enseñando?

Pero, a veces, las causas de una rabieta van más allá de lo evidente. Según Child Mind Institute, puede haber un problema subyacente como trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), ansiedad, problemas de aprendizaje, depresión e, incluso, autismo.  

Si decides desentenderte del comportamiento de tu hijo, solo vas a lograr que el problema se agrave, vas a criar niños poco empáticos, frustrados y, además, tan resentidos que van a tener que sanarlo ya como adultos. En el peor de los casos, ignorar las rabietas de tus hijos también puede agravar una patología.

Sin embargo, también es verdad que cuando un niño hace un berrinche y con él consigue lo que quiere, estamos alimentando un círculo viciosos. De ahí la importancia de indagar en las razones de su molestia y comprenderlos, pero con límites saludables.

Estos son tres consejos que pueden ser de gran utilidad cuando tu pequeño esté en medio de una crisis emocional:

1. Ponte a su altura. Cuando tengas una conversación con tu hijo, agáchate y velo a los ojos. Es una señal de empatía e interés genuino. Tu niño se va a sentir más seguro.
2. Evita las palabras hirientes. Si el niño se siente violentado, su enojo puede exacerbar y eso, a su vez, puede ponerlo en peligro. No dejes pasar comportamientos como golpear o morder.
3. No dejes solo a tu pequeño. Durante un berrinche, el niño está buscando contención emocional, no rechazo. Así que negociar una conversación es el primer paso para ir de la rabieta a la calma y, según Harvard y el MIT, la mejor forma de criar hijos exitosos.

¿Qué opinas sobre estos consejos para padres? Ahora tienes más herramientas para enfrentar los berrinches de tu hijo.

Con información de: Child Mind Institute.

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