Aunque las peleas entre hermanos son completamente naturales, cuando se vuelven demasiado frecuentes hay que establecer límites para la sana convivencia de la familia. Si tus hijos pelean mucho, esto es para ti.
Hay muchos motivos que se pueden esconder detrás de los conflictos entre tus pequeños. Puede ser que se enfrenten por tu atención, celos, envidia, por marcar su territorio o porque no saben de qué otra manera gestionar emociones como la tristeza.
Por ejemplo, en mayor o menor medida los niños experimentarán un cambio con la llegada de un nuevo hermano. Y si no se les prepara adecuadamente, el paso del tiempo solo va a acrecentar los problemas.
Evita perder el control con ellos | Foto: Unsplash
Tips para actuar si tus hijos pelean mucho
A veces, las peleas son provocadas ni más ni menos que por los padres. Las comparaciones y frases como “aprende a ser como tu hermano” pueden ser destructivas para quien apenas está formando una imagen de sí mismo.
Así que, primero que todo, asegúrate de no estar cometiendo ese grave error y, ahora, ayúdate con esos consejos para que tus hijos no se peleen tanto:
- Dedica tiempo individual a cada uno. Asegúrate de compartir uno de sus hobbies o actividades favoritas y de dedicar la misma cantidad de horas a cada hijo. A veces, necesitan de mamá solo para ellos.
Enséñales, por separado, a gestionar sus emociones | Foto: Unsplash
- Dales su espacio. También es importante que no estés sobre ellos reprimiendo y gritando. Eso solo va a empeorar las cosas. La disciplina positiva es una forma muy interesante de poner límites sin perder el control.
- Ten en cuenta los intereses de cada uno. No los vistas igual, no los fuerces a elegir el mismo deporte, eso solo va a dificultar la relación. Los estás poniendo a competir sin darte cuenta.
- Los hermanos mayores no deben ser niñeras. Son protectores por naturaleza, pero eso no quiere decir que deben hacerse cargo de los más pequeños. Deben cumplir su rol particular de hijos, ni más ni menos.
Respeta la posición de cada uno de tus hijos | Foto: Unsplash
- Interviene cuando sea necesario. Si alguno de los hermanos está haciendo cosas inadecuadas o lastimando, de algún modo, al otro, es momento de entrar en acción. Hazlo con amor y empatía, pero también sé firme y fomenta el respeto.
Ver a tus hijos pelear puede ser abrumador, pero en tus manos está fomentar una buena relación entre ellos.
Con información de Guía Infantil.
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