Las 4 leyes del desapego: co?mo usarlas en tu vida para sanar y ser feliz
Crecemos creyendo que seremos felices cuando tengamos tal o cual cosa. De modo que nos...

Crecemos creyendo que seremos felices cuando tengamos tal o cual cosa. De modo que nos pasamos la vida necesitando de algo o de alguien para pasarla bien y eso es peligrosísimo para nuestra salud mental. Por eso, es hora de hablar del desapego.
Es el estado en el que una persona suprime su lazo de unión hacia todo aquello que le rodea. No es que ya no quiera conseguir un mejor puesto o que sea indiferente a su pareja, es que puede vivir con o sin ello. Dicen muchos que es la clave de una vida plena y sin sufrimiento.
Cuando estamos demasiado apegados a cosas y personas, desarrollamos ansiedad, porque tenemos miedo de perderlo. Estamos en el futuro y nos olvidamos de nosotros mismos, nos involucramos en relaciones codependientes y hasta violentas.

Desapego es querer sin necesitar | Foto: Unsplash
¿Cuáles son las 4 leyes del desapego?
Claro que hay un apego sano y ese es justo el que esperamos que se desarrolle entre una madre y su hijo y el mismo que permeará el resto de sus relaciones. Sin embargo, lo más común es encontrarnos con adultos cuyas necesidades afectivas no fueron cubiertas en la infancia.
Son estos adultos los que deben practicar el desapego. Soltar es algo que nos aterra porque significa conectar con nosotros mismos y aceptar que, en términos muy prácticos, estamos solos en este mundo. Estas 4 leyes nos ayudarán a entenderlo mejor:

Es vivir felices con o sin esa pareja | Foto: Unsplash
- Eres responsable de ti mismo. Es tiempo de dejar de culpar a quienes nos criaron de lo lastimados que estamos. Hay que empezar a tomar decisiones conscientes. Empieza a usar frases como “me siento enojada” en lugar de “me hicieron enojar”.
- Vive el presente. Aunque expresiones como carpe diem parecen gastadas, “aprovecha cada día, no te fíes del mañana” es una de las leyes del desapego. Hacer ejercicios de respiración y meditación te ayudará mucho a, simplemente, estar.

Empieza por conectar con tu espiritualidad | Foto: Unsplash
- Acepta que las pérdidas van a acontecer tarde o temprano. Cuando aceptas que la vida es cuestión de ciclos y que todo tiene su final, vas por ahí mucho más liviano. Piensa que hoy puede ser el último día de tu vida y actúa en consecuencia.
- Promueve tu libertad y permite que los demás también sean libres. Es decir, ama cuando estés listo y no cuando estés solo. Sana primero, ve a terapia con regularidad y asegúrate de crear vínculos saludables.
Verás que, siguiendo estos consejos, tu salud mejora y tus relaciones también.
Con información de Bioguia.
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