Lo que pasa si no tienes cabecera en tu cama, según el Feng Shui
La cabecera es parte del mobiliario que revitaliza cualquier habitación. Sin embargo, parece ser que...

La cabecera es parte del mobiliario que revitaliza cualquier habitación. Sin embargo, parece ser que se trata de mucho más que un elemento decorativo, tiene una carga relacionada con la espiritualidad, según el Feng Shui y esto es lo que pasa si no tienes cabecera en tu cama.
Enmarca la cama y se ha convertido en un accesorio sumamente práctico para quienes gustan de leer cómodamente antes de dormir, lo cual, por cierto, tiene beneficios para la salud.
El Feng Shui, una técnica milenaria que busca el equilibrio de la energía vital de la persona en relación con el espacio que ocupa, sugiere que una buena cabecera proporciona protección y descanso en el ámbito individual y de pareja.

Asegúrate de que sea cómoda | Foto: Pexels
Esto es lo que pasa si no tienes cabecera en tu cama
Además de hacer lucir la recámara, la función de la cabecera es evitar el roce de la cabeza con el muro y, por supuesto, que las almohadas no terminen en el piso entre la pared y la cama. Y en términos espirituales, la cabecera se asocia con la seguridad, de modo que si no tienes cabecera pasa obtiene justo el resultado contrario.
Pero no se trata solo de tener cabecera, sino de elegir la cabecera correcta. Las de metal, acero o forjados no aportan nada de solidez, un vinilo o adhesivo decorativo tampoco es lo ideal. Y las cabeceras de espejo podrían generar sensación de incomodidad.

Es mucho más que un elemento decorativo | Foto: Pexels
Pueden estar fabricadas de diferentes materiales, según el Feng Shui, los más recomendables son la madera y los textiles. Sin embargo, también puedes optar por una cabecera con cojines o una tela en la pared.
La recomendación es que, aun si eliges láminas de madera estas estén juntas, pues evita que tu cabeza tenga contacto con la pared y que la energía se escape de este modo.

Cada elemento a tu alrededor suma (o resta) a tu energía vital | Foto: Pexels
Además, resulta clave que tu cabecera sea ancha, de lo contrario, podría llegar a proyectar sha chi, el lado negativo de la energía chi, perjudicial para la fuerza vital y el crecimiento de toda la materia. Evítalo a toda costa.
Cultiva tu espiritualidad poniendo especial atención a este tipo de detalles.
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